Creas el PDF de un proyecto que llevas a firmar al Ayuntamiento, posteriormente recibes el visado del Colegio de Arquitectos y finalmente vuelves al Ayuntamiento donde te entregarán la licencia de obra.
Hasta ese último paso, todas las acreditaciones se han ido otorgando sobre el propio PDF del proyecto, donde cada una de las instituciones ha validado su autenticidad añadiendo un nuevo bloque de información sobre el documento original. Pero, al otorgar la licencia de obra, el Ayuntamiento genera otro documento desvinculado de la cadena de información anterior. De este modo nos encontramos con una licencia de obra en la que se menciona el proyecto pero no tiene ningún tipo de documento acreditativo adjunto.
Lo mismo sucede posteriormente al adquirir la licencia de primera ocupación, la escritura de obra nueva y el registro de inscripción, que son documentos desvinculados de todo el proceso previo a su generación.
¿𝗡𝗼 𝘀𝗲𝗿í𝗮 𝗺á𝘀 𝗲𝗳𝗶𝗰𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲, 𝗰𝗼𝗻𝗳𝗶𝗮𝗯𝗹𝗲 𝘆 á𝗴𝗶𝗹 𝘁𝗿𝗮𝗯𝗮𝗷𝗮𝗿 𝘁𝗼𝗱𝗼𝘀 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲 𝘂𝗻 𝗺𝗶𝘀𝗺𝗼 𝗹𝗶𝗲𝗻𝘇𝗼?
El blockchain es un 𝗱𝗼𝗰𝘂𝗺𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗱𝗶𝗴𝗶𝘁𝗮𝗹 𝗱𝗼𝗻𝗱𝗲 𝘀𝗲 𝗮𝗻𝗼𝘁𝗮𝗻 𝘁𝗼𝗱𝗮𝘀 𝗹𝗮𝘀 𝘁𝗿𝗮𝗻𝘀𝗮𝗰𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗿𝗲𝗮𝗹𝗶𝘇𝗮𝗱𝗮𝘀 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲 𝘂𝗻 𝗮𝗰𝘁𝗶𝘃𝗼, 𝗳𝗮𝗰𝗶𝗹𝗶𝘁𝗮𝗻𝗱𝗼 𝘀𝘂 𝘀𝗲𝗴𝘂𝗶𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝘁𝗼𝗱𝗼𝘀 𝗹𝗼𝘀 𝗶𝗺𝗽𝗹𝗶𝗰𝗮𝗱𝗼𝘀 𝗲𝗻 𝗲𝗹 𝗽𝗿𝗼𝗰𝗲𝘀𝗼. Esta cadena de bloques permite compartir información de forma inmediata con los miembros autorizados.
𝗘𝘀𝘁𝗮 𝗴𝗲𝗻𝗲𝗿𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗱𝗲 𝗯𝗹𝗼𝗾𝘂𝗲𝘀 𝗱𝗲 𝗶𝗻𝗳𝗼𝗿𝗺𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗱𝗲𝗯𝗲𝗿í𝗮 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗶𝗻𝘂𝗮𝗿 𝗮 𝗹𝗼 𝗹𝗮𝗿𝗴𝗼 𝗱𝗲 𝘁𝗼𝗱𝗮 𝗹𝗮 𝘃𝗶𝗱𝗮 𝗱𝗲𝗹 𝗮𝗰𝘁𝗶𝘃𝗼. De esta forma el mismo PDF con el proyecto de obra recogerá todos los pasos que se han seguido desde su concepción, hasta las futuras transacciones de compra-venta, y finalmente su destrucción. Trabajar de esta forma permitirá que la documentación generada sea mucho más fiable y segura.
Aplicar las nuevas tecnologías de la información para ahorrar tiempo y recursos es uno de los pilares sobre los que se asienta la construcción 4.0. Pero, para que esto pueda convertirse en una realidad, es necesario el estímulo por parte de las Administraciones Públicas para la digitalización y transformación del resto de sectores implicados en el tratamiento de la información generada por el sector AECO.
𝗖𝗼𝗻𝘀𝗲𝗴𝘂𝗶𝗿 𝗰𝗿𝗲𝗮𝗿 𝘂𝗻𝗮 𝗰𝗮𝗱𝗲𝗻𝗮 𝗱𝗲 𝗰𝗲𝗿𝘁𝗶𝗳𝗶𝗰𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀, 𝗾𝘂𝗲 𝗱𝗲 𝘀𝗲𝗴𝘂𝗿𝗶𝗱𝗮𝗱 𝘆 𝗮𝘂𝘁𝗲𝗻𝘁𝗶𝗰𝗶𝗱𝗮𝗱 𝗮𝗹 𝗱𝗼𝗰𝘂𝗺𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗴𝗲𝗻𝗲𝗿𝗮𝗱𝗼, 𝗻𝗼𝘀 𝗽𝗲𝗿𝗺𝗶𝘁𝗶𝗿á 𝗮𝘃𝗮𝗻𝘇𝗮𝗿 𝗵𝗮𝗰𝗶𝗮 𝗲𝗹 𝗳𝘂𝘁𝘂𝗿𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗰𝗼𝗻𝘀𝘁𝗿𝘂𝗰𝗰𝗶ó𝗻 𝘆 𝗵𝗮𝗰𝗶𝗮 𝘂𝗻 𝗺𝗲𝗷𝗼𝗿 𝗮𝗽𝗿𝗼𝘃𝗲𝗰𝗵𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗼𝘀 𝗿𝗲𝗰𝘂𝗿𝘀𝗼𝘀.
Angela Alonso Moro, técnico de marketing en DAAG.